La Estimulación Cognitiva: ingrediente esencial para un envejecimiento de calidad.

Seguir manteniendo activas todas las funciones cognitivas es uno de los principales retos a abordar dentro de los programas de envejecimiento activo. Tan importante es seguir desarrollando actividad física como actividad mental. Cuando hablamos de funciones cognitivas hacemos referencia a aquellos procesos mentales que hacen que podamos llevar a cabo cualquier tarea. Algunas de estas funciones son: memoria, atención, praxias, lenguaje, planificación, orientación, etc., entre otras.

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Seguramente, alguna vez hayas oído hablar de términos como estimulación cognitiva, entrenamiento cognitivo, rehabilitación cognitiva, etc., y pese a que son términos parecidos cada uno cuenta con sus peculiaridades que los diferencian los unos de los otros. El entrenamiento cognitivo tiene como objetivo estimular y mejorar el procesamiento de los estímulos que recibe nuestro cerebro a través de la práctica de diferentes actividades. Por otro lado, la rehabilitación cognitiva tiene como finalidad la recuperación o mejora de aquellas funciones cognitivas que se han visto alteradas por un daño en las estructuras cerebrales. Por último, la estimulación cognitiva se refiere a una serie de técnicas y estrategias a partir de las cuales se pretende ejercitar y entrenar las funciones cognitivas. Con ella se busca mejorar, fomentar o potenciar aquellas capacidades y habilidades que aún están preservadas a través de diferentes actividades adaptadas a cada “cerebro”.

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Aunque las personas se hagan mayores, la capacidad que tiene el cerebro para poder seguir modificándose o variando sigue ahí. Con la estimulación cognitiva se pretende retrasar todo lo posible la aparición del deterioro cognitivo sin olvidarnos de fomentar la autonomía de todas las personas que se encuentran en esta etapa. Además, desde el entorno familiar es importante continuar fomentando el aprendizaje y la interacción social a través de acciones cotidianas que permitan el mantenimiento de la autonomía de la persona con síndrome de Down y/o discapacidad intelectual.

Para la Asociación Síndrome de Down de Castellón, la estimulación cognitiva es un pilar fundamental dentro del programa de envejecimiento y por ello se lleva desarrollando este tipo de sesiones desde hace varios años. Actualmente, se trabaja con material manipulativo, actividades en formato papel y con el programa NeuronUp que permite adaptar las sesiones a las características de cada persona y obtener un análisis de lo que se ha trabajado y cómo se ha realizado. Lo interesante de estas sesiones es que luego puedan aplicarse en situaciones del día a día.

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Por tanto, desde nuestra entidad consideramos de especial relevancia la estimulación cognitiva como medida protectora ante el proceso de envejecimiento precoz, con la finalidad de preservar las funciones cognitivas y disfrutar de un envejecimiento de calidad.

Os dejamos aquí el artículo titulado “Envejecimiento y discapacidad intelectual: una doble dependencia” en el que se enfatiza la estimulación cognitiva como medio para poder retrasar el proceso de envejecimiento.

Próximos temas: ocio y tiempo libre 

En el mes de noviembre abordaremos un tema muy interesante:  la influencia que tiene el ocio y el tiempo libre en la calidad del envejecimiento de las personas con síndrome de Down y/o discapacidad intelectual. Si tienes alguna consulta sobre este u otros temas que te puedan interesar, puedes enviarnos tus comentarios a comunicacion@downcastellon.com